Ante
los preocupantes acontecimientos provocados a raíz de la reciente renuncia del
Alcalde a seguir presidiendo la
Junta del Mercadillo, y la
posterior convocatoria cursada por el mandatario municipal a los agricultores
para que acudiesen a una reunión en el Ayuntamiento al objeto de tratar el
funcionamiento del Mercadillo, encuentro -por cierto- que terminó antes de lo
previsto al abandonar los agricultores el salón, indignados tras escuchar las
propuestas que se les hacía, Sí
se puede quiere hacer público
su apoyo decidido al colectivo del Mercadillo de Tacoronte, sometido a la
presión injustificada del señor alcalde de Coalición Canaria, Álvaro Dávila
González, en una nueva deriva autoritaria a la que se está acostumbrando el
primer edil tacorontero.
Pareciera
que los gestores municipales estén empeñados en aniquilar toda actividad
agrícola y comercial en el pueblo, pues no contentos con haber dejado
profundamente dañado el Mercado municipal, al que han conducido a una situación
de penosa agonía, pretenden ahora acosar al emblemático y floreciente
Mercadillo del Agricultor de Tacoronte, decano de este tipo de instalaciones
comerciales en nuestra isla, con más de treinta años de existencia en su haber.
Desde Sí se puede queremos hacer saber a los
agricultores del Mercadillo y a sus familias que pueden contar con nosotros
para defender con denuedo, dentro y fuera del Consistorio, sus justas
reivindicaciones.
Al
propio tiempo, queremos transmitir a productores y clientes de este municipio y
del resto de la isla, nuestra intención de mantener una postura firme en
defensa del Mercadillo tacorontero y de su autogestión por quienes, día a día,
trabajan la tierra y se ganan honradamente la vida con la venta de sus
productos los fines de semana.
Por
último, entendemos que cualquier proceso de cambio que fuera preciso llevar a
cabo para optimizar el funcionamiento de nuestro Mercadillo debe abordarse
desde el compromiso y el consenso con los sectores implicados, por lo que
llamamos al grupo de gobierno y a los partidos de la oposición a dialogar con la Asociación del Mercadillo a fin de buscar
conjuntamente, desde el respeto mutuo, la reflexión sosegada, la cordura y la
buena voluntad, las soluciones más satisfactorias para el interés
general.
Defender
hoy a los agricultores, en un escenario de crisis galopante, es defender un
futuro sostenible para todos.