La organización de izquierdas muestra su satisfacción por la obra ejecutada por Demarcación de Costas, “que va a permitir a los rosarieros y a los visitantes de otros municipios disfrutar de una playa, un paseo y una zona de esparcimiento y ocio que eran necesarios”.
Sin embargo, Sí se puede critica que siendo el Ayuntamiento el encargado del acondicionamiento del entorno de obra, haya cometido algunos errores graves, como “que no se haya previsto ninguna zona de aparcamiento extra, cuando la afluencia de visitantes se espera que sea muy superior a la actual y ya se ha demostrado que son insuficientes las plazas con las que está dotada la zona de playa y paseo”.
Desde Sí se puede se insiste en que, “a pesar de que el alcalde, Macario Benitez, comentara que va a solventar este problema con una mejora del servicio público de guaguas, queda en el aire la frecuencia de esa línea, su alcance y, sobre todo, si va a ir acompañada de un mayor control policial de la zona, ya que en la bajada desde la autopista a Bocacangrejo puede colapsarse en caso de que se comience a aparcar en la ladera (como ocurre en la playa de Las Gaviotas), y en la bajada por Radazul va a dejar sin zona de aparcamiento a cientos de vecinos que sólo podrán acercarse a sus casas en guagua”.
Otro error en estas obras que denuncian desde Sí se puede, es “la excesiva iluminación usada en el parque, tanto en consumo como en potencia lumínica empleada, incumpliendo la Ley del Cielo de Canarias”.
Igualmente, para la organización ecosocialista, “ la vegetación que se está utilizando en el paseo que une Radazul y Tabaiba está compuesta por estrelitzias y plataneras, plantas exóticas muy poco adecuadas para una zona de litoral, en vez de utilizar por ejemplo tarajales, arbustos autóctonos que crecen al amparo de la maresía”.
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